Cada vez que me siento a escribir me quedo en blanco.
Cuando realmente tengo algo para escribir estoy demasiado cansada para hacerlo y me prometo a mi misma escribir a la mañana siguiente, pero nunca pasa.
Pero hoy si tengo un tiempito para Hazel.
Comienza a asustarme el hecho de que cada vez estamos más cerca de llegar a mitad de año y el
tiempo pasa, y mi vida sigue igual. También me asusta que lleguen las vacaciones de invierno porque duran un mes, mucho tiempo, y es un mes en el que la depresión vuelve porque estoy todo el tiempo en casa, sola, encerrada. No me gusta. Y nada de lo que digan me hace pensar diferente. Si bien, puede que algunos días tenga planes pero los siguientes ya no. Y es un dolor de ovarios convivir con mi mente, nos llevamos muy mal porque sólo quiere matarme.
Sin querer la universidad y las tareas me salvan. Por eso curso tantas materias y me mantengo todo el tiempo ocupada, simplemente para no pensar. Pero los momentos que estoy sola, son de terror, hasta en el camino de vuelta a casa debo escuchar música para alejar los malos pensamientos que de una forma u otra siempre regresan por mí. Sobre todo por las noches cuando intento dormir, lo bueno es que siempre estoy demasiado cansada. Pero también me despiertan a la madrugada... eso ya es otro tema.
Son los fantasmas del pasado, del presente y del futuro. Me reclaman lo que hice mal, lo que no hago y lo que nunca llegaré a ser. Me agobian y solo me culpan por lo idiota que siempre fui. Es el martirio del día a día. Creo que eso siempre estará junto a mi.
No me gusta que el tiempo avance porque tarde o temprano llegará el día de mi cumpleaños, y junto a él la larga lista de cosas que no logré hacer ese año. Y hay un factor que siempre está ausente, love. El amor en todas sus facetas, el de las otras personas hacia mí, el mío hacía las personas que inevitablemente quiero pero no demuestro, el amor de ese alguien que se esconde o no existe y sobre todo y más importante, el amor hacía mi misma.
Lo trato, juro que trato amarme pero si realmente me pongo a pensar, no me quiero. Hoy me di cuenta de que desde hace varios meses que no me saco selfies. Suena como una pelotudez bárbara, pero todo el mundo lo hace. Si te arreglas y te pones linda, qué mejor que sacarte una selfie y postearla en alguna red social para que todos admiren tu look. Mi última y excusa favorita hacia esto es que no tengo tiempo. Ni para sacarme fotos, ni para revivir mi ig, ni para maquillarme lo suficiente para quedar linda, y como sabrán, ni para publicar en el blog. Pero son excusas.
Si hay algo que sé, es que las excusas son simplemente eso, excusas. Si realmente queremos hacer algo lo hacemos y listo. Y yo simplemente no puedo sacarme fotos porque me veo y siento fea, gorda, etc. Las únicas fotos que tengo en mi celular de los últimos meses son fotos en las cuales salgo con mis grupos de amigas, vestida de negro, sonrisa falsa obvio, y sin recuerdos de la foto. Porque estaba bajo la influencia de alguna sustancia o porque simplemente no estaba presente durante el momento. Porque ya pocas cosas me importan y me llaman la atención de la vida.
Soy como un alma en pena que divaga por el mundo, intentando hacerles creer a todos que es feliz. Que su vida es agraciada y que no tiene problemas porque no los cuenta. Pero es lo contrario.
Me siento miserable con cada minuto que pasa porque no tengo lo que quiero. Felicidad.
Nos leemos.
PD: El lunes me tembló la cara dos veces en el día durante largos periodos de tiempo, la segunda vez me duró tres horas seguidas. Fue sólo por nervios o hay otra razón? Les paso alguna vez?
Hay cosas con las que tenemos que aprender a convivir porque pelearlas se hace muy duro y no siempre sirve. Es decir, las cosas que son crónicas. Otras seguro podrás mejorar, pero vos sola lo vas a descubrir.
ResponderBorrarLo de la cara nunca me pasó, tal vez sea ansiedad supongo.
Te sigo.
A mí lo que me pasó esta semana es que no podía con el puto dolor de cabeza, depresión, ansiedad o estrés? la verdad es que pueden ser las res putas cosas, así que bleh...
ResponderBorrarNunca me ha pasado lo del temblor de cara , mejor ves a un hospital para asegurarte de que no es nada grave. Mucho ánimo con todo.
Como dice una letra de una de mis canciones favoritas ``deja las cosas pasar y que digan su nombre´´ , limítate a disfrutar de cada uno de esos momentos.
ResponderBorrarUn beso te dejo mi enlace por si te apetece pasarte
http://seacaboelcuento.blogspot.com.es/
Te sigo