martes, 25 de junio de 2019

Walking disaster


Tomé de más, estoy volada en el auto de no se quién.
Amanece y miro el cielo, la luz atravesando las nubes,
borrando la oscuridad con cada segundo que pasa.

Estoy muy lejos de casa y me siento vacía como siempre.
No sé quién es pero me sonríe. Tiene los ojos rojos igual que yo.

Miro por la ventana y me encuentro con lo que queda 
de mi lugar favorito cuando era niña.
Cumpleaños, risas, juegos, amigos, recuerdos vienen a mí,
y la calidez de esos días de primavera se apoderan de ese momento.

Pronto me doy cuenta de lo mucho que cambié,
y me pregunto desde cuándo estoy tan ahuecada.
Tan podrida por dentro y reluciente por fuera.
Un desastre que aún camina y respira sin entender por qué.

Me mira de nuevo y limpio mi labial de sus labios.
No se quién es.
Igual, ya lo olvidé.




Nos leemos.

viernes, 21 de junio de 2019

Desde adentro

Veo un atardecer rosa a través de la ventana,
detrás de la mirilla de la puerta también se lo puede ver.
Parece un cielo de verano aunque éste día marca el primero del invierno donde vivo.
No es sólo rosa, es naranja también. 
Hay tonos grises, porque esta oscureciendo.
Falta poco para no verlo más.
Y lo espío desde adentro, en lugar de apreciarlo con mis propios ojos y sentir la brisa en mi cara.
Así veo la vida también.
Así veo al amor, desde lejos. Escondida en la comodidad de mi soledad.
Lejos del alcance de todos, refugiada entre cuatro paredes. Donde nada pueda lastimarme.
Porque el amor lastima. Siempre alguien quiere de más. A veces yo, muchas otras yo no.
¿Acaso es mi luna en acuario? ¿O es que no tengo corazón? 
O quizás lo tiene él y aun no me lo devuelve.


Nos leemos.


martes, 4 de junio de 2019

El ayer

Después de semanas actuando como una adulta normal, la vieja y loca Hazel comienza a rasguñarme las entrañas queriendo salir. Me lastima, sangro y tiemblo. No la quiero ver. No la quiero escuchar.
Pero ahora está frente a mi y me cuesta verla a los ojos. Tiene una mirada profunda, siento que me quema, que me odia, que me quiere convencer de algo, pero no se qué. 
Siempre intenta llevarme de vuelta al ayer, no me perdona, no me deja ser. Me dice que no soy normal y por lo tanto no debería actuar como tal. Que estoy gorda, que no me hago más joven y que estoy sola porque nadie me quiere, ni ella. 
Nos leemos.


sábado, 1 de junio de 2019

Siempre solos

Crecer es darte cuenta de que vas a estar siempre solo. 
Quizás no los sábados por la noche, pero si los domingos por la tarde. 
Los cumpleaños ya no son como cuando eras chiquita, tu mamá ya no manda invitaciones ni te hace una torta, ahora los pasas rodeada de extraños y alcohol. Sola entre un mar de gente. 
Tus amigos solo están de vez en cuando o menos que eso, cuando les pinta, o a vos verlos. 
La familia igual y muchas veces es mejor no verlos tanto. 
Y quedas sola. Acompañada por vos misma, incluso un sábado por la noche. 
¿O cuando tu compañía es tan buena que te gustaría compartirla con alguien más?


Nos leemos.