Espero no ser la única que espera ansiosa el 2018 para que su vida cambie magicamente por completo.
Mas de una vez dije que me aterra comenzar un nuevo año porque no sé que va a pasar y lo desconocido me da mucho, pero mucho miedo; y el futuro, obvio. Pero esta vez realmente quiero dar vuelta la página y comenzar de nuevo, una vez más.
Tengo unos cuantos planes, no tanto metas porque me di cuenta de que debo ir un paso a la vez. Y siendo la persona asquerosamente perfeccionista que soy, un error y ya me muero. Así que, despacio.
Pero tengo eventos importantes para enero, uno en especial que me da mucho miedo pero es algo que vengo posponiendo desde hace años. Y se que es lo único que puede hacer mejorar mi vida.
Spoiler alert: Terapia.
Me angustia mucho la idea de dejar entrar a una persona en mis pensamientos, decirle todo de mi vida y como me hace sentir todo. Me avergüenza y también me preocupa como reaccione ante eso. Quizás mienta, quizás desaparezco y no vuelvo más, quizás me da miedo contar cosas muy fuertes porque no quiero que me consideren una amenaza para mi misma, quizás comienzo a actuar normal como siempre lo hago y dejo pasar la oportunidad de mejorar mi calidad de vida.
Pero lo que más miedo me da de todo esto es que no tenga efecto en mi, que me decepcione, que no me guste, que no me sienta cómoda... porque realmente es mi última esperanza.
Se que muchas veces hable sobre ir a terapia y nunca lo hice, y fue por todos estos miedos que detallé y millones de otros más. Pero no me gusta la dirección que está tomando mi vida y ya no puedo cambiar, ya no puedo fingir que esta todo bien cuando esta todo pésimo. Ya no me sale, cada vez estoy peor y no soy la única que lo está notando.
Así que es algo que debo hacer, como si mi vida dependiera de eso. Y lo haré, todavía no sé muy bien como lo haré, pero me voy a exigir (como siempre lo hice) pero esta vez por una buena causa.
De todas formas, aún no estoy lista para romperle la burbuja de fantasía a mis padres. Creo que no les diré por ahora. Comenzaré haciendo las cosas sola, quizás se lo diga a mi padre, pero no estoy lista para confrontar a mi mamá.
Aunque lamentablemente, hace un par de noches mi madre me encontró en medio de un ataque de pánico. Traté de manejarlo como pude pero mi llanto era incontrolable, estaba en plena crisis. Lo bueno es que ella solo me abrazó y me dijo que todo estará bien (luego le dije que se fuera porque me sentía como una pelotuda por ser tan débil, tan vulnerable, tan estúpida). Una hora después cuando estaba más calmada me llevó un té hasta mi habitación y me sentí mejor.
Hay cosas que aún no puedo enfrentar, y una de ellas es mi madre. Es perfecta y quiere que yo también lo sea, pero no puedo. Yo también quiero serlo, pero no puedo.
Buscando la perfección me olvide de mí, olvide que yo no soy perfecta.
Gracias por leer.