lunes, 30 de octubre de 2017

Otro día menos

Me levanto cada mañana con la esperanza de que será mejor y con el miedo de que no.
Desayuno el café mas negro que te puedas imaginar, rogando que me de las energías suficientes como para no regresar a la cama.
La música me calma y me invita a mirar los días de un modo menos trágico.
Cierro y aparto los libros, los alejo de mi vista y hago de cuenta que no están ahí. Hoy no, me digo. Tampoco mañana, no quiero lidiar con esto.
El ocio me abruma pero no quiero salir de casa. No quiero responder mensajes. No quiero ver a nadie.
Llega el mediodía y no quiero comer, pero lo hago de todos modos para engañar el estómago y a mi misma.
Si tomo una siesta quizás mi cabeza deje de hacer un ruido un rato. No, mejor no. Tampoco quiero ejercitar. Prefiero ver una película de cualquier cosa. ¿O quizás salir de casa?
Las horas pasaron y estoy sola de nuevo.
Hoy vi a mis amigos y estaba ausente en mi propio cuerpo. Sonreí un par de veces cuando sus miradas mostraban asombro y desconcierto por mi comportamiento. Sobreviví.
Es hora de una ducha larga para matar las horas de la noche y luego un té que me calentará el alma, mejor que un abrazo que no tendré.
Apago el celular porque no quiero responder ni saber de nadie.
Me aíslo, me aparto, me voy.

Otro día más, otro dia menos.



Nos leemos.

martes, 24 de octubre de 2017

Decepciones

Uno de mis mayores miedos siempre fue la decepción, sobre todo la idea de decepcionar a mis padres. Pero con el tiempo ese miedo se convirtió en realidad. 
No paro de decepcionar y decepcionarme. Y cada día se nota más que nunca fui ni seré perfecta como todo el mundo esperaba. Soy humana, soy imperfecta, pero me duele que sea así.
Y la gente también me decepciona a diario. Y yo sigo como una firme creyente de la buena gente, soy como una nena que sigue creyendo en Santa Claus aunque vio a sus padres comprando los regalos de navidad. Pero no puedo dejar de hacerlo. Y sufro por eso, sufro de decepciones y por la gente que ya no está en mi vida.
Ojalá creyera así tan ciegamente en mi misma...
Yo misma también me decepciono, no hago las cosas que mi yo del pasado habría querido. Estoy echando a perder todo el esfuerzo de años anteriores por episodios de mierda. Estoy confundida, aturdida, desesperada, pero no grito, ni me hago cargo de mis responsabilidades. Solo estoy. Solo existo mientras mi mundo se viene abajo. Y por dentro pienso que nada tiene sentido porque este no es mi lugar de todos modos, igual siempre me quise suicidar, total ya hice todo mal y no puedo hacer nada para cambiarlo.
¿Y si quiero revertir todo lo malo que hice? ¿Por donde empiezo?
Todo es más duro y complicado cuando sos adulto. Me encantaría tener 8 años nuevamente y sentarme atrás del auto de mi abuelo mientras me conduce hacia una plaza mientras me cuenta sus más grandes aventuras de joven. Pero hace 6 años que no escucho su voz, vendieron su auto apenas murió y yo definitivamente ya no soy una nena. No puedo volver.
No se quien soy, no se que quiero, no se nada y siempre quise saberlo todo.

Nos leemos.



lunes, 16 de octubre de 2017

Dolor de rutina

Corro y me cuesta respirar,
deliro y no veo nada.
Caigo entre tus brazos y me empujas,
te alejas, porque sabes que no soy nada.

Como y no me lleno,
lloro y no sano.
Me lastimo pero solo me duele el alma.

Solo camino sin rumbo,
sin vos.
Porque nací para estar sola,
porque nací y me olvide de vivir.


----

Quiero agradecer a las hermosas personitas que me saludaron en la entrada anterior❤❤❤
Nos leemos.

sábado, 14 de octubre de 2017

Mi mejor versión

¡Feliz cumpleaños Hazel!
Hace 23 años llegaste a este mundo imperfecto, demasiado impuro para tu corazón, un mundo violento y tenebroso pero con sus tonalidades grises con destellos.
Viniste con una mochila enorme de expectativas, de sueños y fantasías que no te dan paz.
¿Quién dijo que tenes que estar recibida a esta edad? ¿Y qué si no tenes un novio para un rato? ¿Y qué si no laburas todavía?
La vida es simple, pero tu cabecita nunca para y siempre estará llena de los "y qué pasaría si..."
Sos tan delicada y dulce, pero tenes un lado oscuro y frío, algo llamado depresión. Hoy ella te hará sentir estúpida, te dirá que salís mal en esa foto que subió tu amiga, que en realidad no son tus amigas y solo están con vos porque se conocen desde hace un tiempo y no queda otra, que él no te habló porque ya no le importas. Y si, hay cosas que son ciertas, ¿pero qué tiene? 
Vos sos especial.
Sos amada y sos buena. Nadie más es como vos. Y dichoso aquel que sepa apreciarte completamente.

Felices 23 años querida Hazel, prometo cuidarte mejor.


Con amor, tu mejor versión.



Lamento mucho todos estos meses de ausencia, pero estuve en mi peor momento. Este año fue desastroso para mí, no se imaginan.
Pero de a poco me levanto y acá arriba les dejo una carta que me escribí anoche cuando me sentí tan sola, hasta que me di cuenta de que me tenía a mi misma.

De ahora en más me verán más seguido por acá ya que ahora al fin tengo el ordenador conmigo, así que estaremos en contacto.
Muchas gracias.

Nos leemos.